Volaban los camarones por bulerías, antes de que tus canciones fueran tan mías, usted perdone, tan tuyas, tan de fulano, fatiguitas y casullas, viva mi hermano.
Viva tu hermana la rubia, musa alfarera, que canta bajo la lluvia su petenera, que canta bajo la lluvia su petenera,
su saeta deslenguada, su grito en celo, que aroma la madrugada con su pomelo, que aroma la madrugada con su pomelo.
Porque primus interpares era tu brinco, no hagas ripios malabares que te la jinco, tan albano kosovar, tan Lydia Lozano, tan cristiano, tan vulgar, tan chic, tan afgano.
Tan vecinos y tan lejos, verte y no verte, tan jóvenes y tan viejos, muera la muerte, tan jóvenes y tan viejos, muera la muerte.
Tu colección de ciudades otros la cobran, yo canto mis soledades porque me sobran, yo canto mis soledades porque me sobran.
Inspiración y mujeres, rubia morena, me clavan los alfileres, en la verbena, me clavan los alfileres.
Mi sobrina nietecita se llama Luna, se corten una miajita los de la tuna, le dijo la Lola al facha de don cupido, consintiendo lo que tacha, su consentido.
Viajes en vuelo charter, sin despedida, mis paisanos cortan trajes a mi medida, mis paisanos cortan trajes a mi medida.
Vacilón que se propasa pero no llega, mi corazón es la casa de los Ortega, mi corazón es la casa de los Ortega.
Por no hablar de sentimientos, tiempo y compás, el feeling es un lamento, de Barrabás, el feeling es un lamento.
Almohada enamorada, del desalmado, casi todo es casi nada, casi pecado, casi todo es casi nada.