MANÍ, MANISERO, MANÍ, SI TE QUIERES POR EL PICO DIVERTIR CÓMPRATE UN CUCURUCHITO DE MANÍ. CUANDO LA CALLE SOLA ESTÁ, CASERA DE MI CORAZÓN, EL MANISERO ENTONA SU PREGÓN Y SI LA NIÑA ESCUCHA SU CANTAR LLAMA DESDE SU BALCÓN. DAME DE TU MANÍ, ESTA NOCHE NO VOY A PODER DORMIR SIN COMERME UN CUCURUCHO DE MANÍ QUÉ CALENTICO Y RICO ESTÁ, YA NO SE PUEDE PEDIR MÁS. AY, CASERITA, NO ME DEJES IR PORQUE DESPUÉS TE VAS A ARREPENTIR Y VA A SER MUY TARDE YA. MANÍ, MANISERO SE VA, CABALLERO, NO SE VAYAN A DORMIR SIN COMPRARME UN CUCURUCHO DE MANÍ.