En mi pueblo la luna es tan grande y es tan bella que los gallos despiertan para cantarle a ella.
En mi pueblo la esperanza es como la marea o la nube que pasa con su húmeda huella.
En mi pueblo los hombres han tomado partido algunos por la vida otras contra ellos mismos.
Pero la tierra agreste va pariendo el camino en que todos los pasos lleven un solo ritmo.
Con perfume de oreganal el camino se llenará si es muy largo el verano siempre habrá la sombra de algún guayacán. (bis)
Mi pueblo es Juan Bariaca y es Tulio Guariato es Rafael Primera el viejo querendón y son las manos madre de todas las tinajas y es la fruta espinosa y dulce del cardón.
Mi pueblo cada día se limpia y purifica no ha habido trago amargo que mate su alegría se despereza ahíto por el sol y la brisa que nos trae el perfume que da el semerucal.