(Chabuca Granda) Mientras jugó la guerra de los niños con un fusil hecho de cualquier cosa quizá de arroz, quién sabe de una rosa envejeció de amor cargando furias.
Y se enroló a morir donde antes quiso simplemente sucede y como dijo ese día el fusil era una rosa rastrillada en el aire, peligrosa. Ese día era el sol más sol al río, más río el río y más la guerra era y más la muerte desde la ribera contra el leve fusil que era ese día solamente una rosa.
Ese día era el sol más sol al río más río el río y más la guerra era y más la muerte desde la ribera y una granada el verso detonado.
Abierta está la rosa colorada en la margen del río enraizada. Quedó al rocío que llovió de un río aquel hundido río en sus venas rotas, abierta está, alerta como entonces al hombro del poeta.
Va ganando la guerra con su rosa la boca desde el río, sus pájaros, sus árboles. Y es que jugó la guerra de los hombres haciéndose un fusil de cada cosa que no fuera un fusil. Ese día se armaba de una rosa El fusil del poeta es una rosa.