Destapa el champagne, apaga las luces, dejemos las velas encendidas y afuera las heridas.
Ya no pienses más en nuestro pasado, hagamos que choquen nuestras copas por habernos encontrado.
Y porque puedo mirar el cielo, besar tus manos sentir tu cuerpo y decir tu nombre, y las caricias serán la brisa que aviva el fuego de nuestro amor, de nuestro amor.
Puedo ser luz de noche, ser luz de día, frenar el mundo por un segundo y las caricias serán la brisa que aviva el fuego de nuestro amor, de nuestro amor.
El tiempo dejó su huella imborrable, y aunque nuestras vidas son distintas, esta noche todo vale.
Tu piel y mi piel, ves que se reconocen, es la memoria que hay en nuestros corazones.
Y porque puedo mirar el cielo, besar tus manos sentir tu cuerpo y decir tu nombre, y las caricias serán la brisa que aviva el fuego de nuestro amor, de nuestro amor.
Puedo ser luz de noche, ser luz de día, frenar el mundo por un segundo y que me digas cuánto querías que esto pasara una vez más, y otra vez más.
Sin tu amor no sé vivir, porque sin tu amor yo me voy a morir de pena. Sin tu amor no sé vivir, porque sin tu amor yo me voy a morir de pena.