En la frontera entre la ceniza y el fuego, una mordaza cae al vacío.
No hay nada más peligroso
Caen los sueños!
Caen los sueños, ser rompen en el abismo.
No hay peor silencio que el que impone el yugo. No hay nada más peligroso.
Solo la fuerza de nuestro reflejo en mil trozos de cristal roto, tantas veces golpeado nos empujará río abajo, nos empujará río abajo hasta abrazarnos en el mar!
Solo la fuerza de nuestro reflejo, tantas veces golpeado, nos empujará río abajo hasta abrazarnos en el mar!