Yo muero extrañamente... No me mata la Vida, No me mata la Muerte, no me mata el Amor; Muero de un pensamiento mudo como una herida... ¿No habéis sentido nunca el extraño dolor De un pensamiento inmenso que se arraiga en la vida Devorando alma y carne, y no alcanza a dar flor?
*extract from a poem called Lo Inefable by Delmira Agustini