Las luces se apagaron y dos historias se juntaron en la cama, para mezclarse entre ellas, aquí no hay protagonistas, no hay mas que dos novelistas, retratando en sus espaldas tiernas y dulces caricias así fue, que la historia comenzó, así fue, que en sus brazos se entregó, que su cuerpo estremeció convirtiéndose ella en rosa y él la riega con amor.
Son dos mundos que se encuentran, una noche y nada más cuando llega la mañana la sonrisa se les va. Son dos historias distintas, que se mezclan sin pensar que juntando dos novelas, se hace más largo el final.
Un hasta luego, un beso en la mejilla aquí no pasa nada, todo esto se te olvida unas semanas y tu mentira, se hace fuerte y cotidiana y presientes que la extrañas, así fue, que la historia terminó, así fue sin pensarlo se marchó con la fuerza del amor y en su vientre se ha quedado, lo que para tí es pasado.
Son dos mundos que se encuentran, una noche y nada más cuando llega la mañana la sonrisa se les va. Son dos historias distintas, que se mezclan sin pensar que juntando dos novelas, se hace más largo el final.