¿Por qué tanto perderse, tanto buscarse sin encontrarse? Me encierran los muros de todas partes.
¡Barcelona!
Te estás equivocando. No puedes seguir inventando que el mundo sea otra cosa, y volar como mariposa.
¡Barcelona!
Hace un calor que me deja fría por dentro con este vicio de vivir mintiendo.
Qué bonito sería tu mar si supiera yo nadar.
¡Barcelona!
Y mientras estás llena de caras de gente extranjera, conocida, desconocida, y vuelto a ser transparente, no existo más, Barcelona, si no es cosa de tus ritmos, tu laberinto extrovertido.
No he encontrado la razón por qué me duele el corazón, por qué es tan fuerte que sólo podré vivirte en la distancia y escribirte una canción.