Si tu supieras mi sufrimiento, si te contara la pena tan grande que llevo tan dentro la triste historia que noche tras noche de dolor y pena llena mi alma, surge en mi memoria como una condena.
Si tú supieras, te importaría si te dijera que en mi ya no queda ni luz ni alegría; que tu recuerdo es el daño más fuerte que me hago yo mismo por seguir soñando conque tu regreses arrepentida (bis).