Tengo los ojos azules, tengo los ojos azules y el corazoncillo igual que la cresta de la lumbre. De noche me salgo al patio, y me harlo de llorar, de yer que te quiero tanto y tú no me quieres ná. Esta gitana está loca pero loquita de atar que lo que sueña de noche quiere que sea verdad. Las manos de mi cariño te están bordando una capa con agremán de alhelíes y con esclavina de agua. Cuando fuiste novio mío, por la primavera blanca, los cascos de tu caballo cuatro sollozos de plata.
La luna es un pozo chico, las flores no valen nada, lo que valen son tus brazos cuando de noche me abrazan, lo que valen son tus brazos cuando de noche me abrazan.