Porque vivo, como ves, como las aves siempre vagabundo. Porque junto a mi, en verdad, no existe nadie que me marque un rumbo, porque tengo la avidez de un perro viejo, sé callar lo nuestro, porque sé que en el amor nos entendemos; tienes que seguir pensando sólo en mí.
Porque tienes que guardar la compostura de una gran señora. pero sé que necesitas de aventuras más que de otras cosas. Ya sabemos qué nos gusta y como somos y nos complacemos, y a la vez soy un romántico discreto; tienes que seguir pensando sólo en mí.
Porque sólo yo, te puedo regalar, todo el amor que te hace falta, te puedo ver mil veces sin que nadie sepa nada, pues nadie a mí me exige explicaciones ni palabras.
Porque sólo yo, te puedo procurar, todo el amor que te hace falta; yo sé perfectamente lo que quieres si me llamas; que pena si una cosa así tan bella terminara.