De toda la flota el era el mas jalador. No habia rival para este ganan. Pata de perro por aquí, Pata de perro por allá. Mario era el nombre de este buen carnal, Por todos lados va, ya no regresara.
El tiempo se aprovecho y todo lo transformo. Viejo el barrio, viejo hasta el danzón. Un amigo se caso, a otro panza le salió. Nueva flota apareció y en la esquina ya nada es igual, era mejor viajar.
Un buen día llego el rumor que un amigo de un señor en un barco se lo topo. Que habia estado en Nueva York, y bailado en Japón, que en Brasil se enamoro, y en Haití toco el tambor, a Mandela conoció, y en URSS se emborracho. Nadie supo si es verdad. Sus amigos suelen recordar que el era un buen carnal que decidió viajar.