Además de que me abraces, le pedí que me quisiera, pero no era una cualquiera, era una puta con clase.
Por cabeza no pedía, más ni menos de lo que valía por cabeza nunca daba, más ni menos de lo que cobraba.
Pude lograr lo que nunca otro hombre pudo lograr, demostrarle de verdad que había tanta pasión junta dentro de mi corazón ahi en su cama desparramado en media hora de infierno toque el cielo con las manos.
Se notaba, en el colchón, mas sudor que en cualquier otro, y con caricias intentaba sanar su corazón roto.
Porque hace falta, mucho más que dinero o propina de segunda para tapar en el alma ese agujero que de amargura se inunda.
Y ahora nuestra preciosa dama ya no labura de cama quiere ganar de otra forma la guita, la que antes era Afrodita.
Y yo sigo llamándola, pero ya no se viene a dormir si no hay mal, que por bien no venga que bien te trajo hasta mi?
Y yo sigo llamándola, pero ella no se viene a dormir si no hay mal, que por bien no venga que bien te trajo hasta mi?