Por primera vez, por primera vez me he sentío hombre sin saber por qué, seguramente tú tengas la culpa por ser tan mujer.
Yo vengo a darte los recuerdos de un hombre que conocí, vive, vive pero siempre vive acordándose de ti. Me lo encontré en el camino y nos hicimos hermanos, le invité a que subiera al lomo de mi caballo y en una venta, tomando vino y más vino a mi hermano de camino le escuché dos o tres letras: "mi novia se llama Estrella y tiene un firmamento solito pa ella".
Solo te besé una vez y cuando pienso en tu beso mi boca me sabe a miel.
Anoche soñé contigo, fue como un cuento de hadas, yo era el príncipe del cuento y tú la reina encantada. Yo te besaba tu boca y tú mi pelo acariciabas y las estrellas del cielo de felicidad lloraban, cuando yo me desperté y vi que tú me faltabas quise quedarme dormío pero el sol no me dejaba.
Por la madrugá, por la madrugá tu pecho de seda es pa mí ná más.
Y tú me besas la boca y tú me muerdes los labios y me ruegas y me lloras y tu vida es un agrabio ¿y qué culpa tengo yo si yo no puedo remediarlo? que te quiera es imposible porque yo en mi corazón no mando.