[Estribillo] Aquella tarde la vida giró, aquellos brazos, aquel corazón, aquellos días la vida trazaba un camino, aquella tarde todo acabó y repetimos.
Aquella tarde, el Sol moría solo, el parque de mi alma me esperaba en otro folio, marchito, maldito, con furia confiada, mis sueños y mi cuerpo se tensaban y pensaban, mandarlo todo al traste, tachar mis emociones, manchas mis ojos limpios con el humo y las canciones, poetas olvidados se acordaban de mí, una nube de cenizas escribía un cielo gris, apagado como tantos, pagado como pocos, vagando en las estrellas con la demencia de un loco, anciano corazón hecho roca por tocarte, la vida me apartó y de pronto me convirtió en Arte, el niño ilusionado, el hombre erosionado, cariño encasillado, camino distorsionado, peregrino del viaje del dios de los ateos, siendo el mismo crío que jugaba en el recreo crucé el mar del vértigo, remé contracorriente, el mago de Occidente que olvidaba el Sol naciente, en medio de mis llantos y tristezas sin fin, mis nervios y torpezas empezaron así, fui solución incompleta dentro de mis poemas, jugándome la vida defendiendo mis teoremas, estuve equivocado y eso me hizo crecer, aquellos días, volví a morir y a nacer.
[Estribillo] (x2) Aquella tarde la vida giró, aquellos brazos, aquel corazón, aquellos días la vida trazaba un camino, aquella tarde todo acabó y repetimos.
Aquella tarde el cielo lloraba hojas secas, aquellos llantos, aquella canción incompleta, miré mi rumbo, las horas trazaron destinos, aquella tarde todo empezó y comprendimos el mal del hombre, la historia que contaban ancianos apagados con el brillo en sus miradas, sencillo pero complicado: nada es eterno, el tiempo dibujó un infierno y volvimos a vernos, en otro plano, en otra realidad escrita, vencimos luego, la Luna lloró en nuestra cita, besos sagrados con el verso y los sentidos, mi pluma arrepentida repetía aquel camino, aquella tarde el frío tocaba tu cuerpo, aquel instante, aquel vagabundo del viento, viajaba lejos con las notas de sus sueños, el niño quería crecer y abandonar el reino de la verdad oculta, de las pasiones huecas, del daño de la culpa de saber que todo vuelca, pasaron años escondido en un estante en una habitación errante sin llaves ni puertas, aquella tarde el ritmo tocó mis latidos, aquellas frases le dieron al mundo sentido, aquel milagro cambió de repente mi infierno, aquella tarde escribí mis primeros recuerdos.
[Estribillo] (x3) Aquella tarde la vida giró, aquellos brazos, aquel corazón, aquellos días la vida trazaba un camino, aquella tarde todo acabó y repetimos.
Todo acabó y repetimos... Todo acabó y repetimos...