Te conquistaron con plata y rajaste para adentro: las luces malas del centro te hicieron meter la pata. Poco te importó, che, ingrata, el afán de figurar enfermó tu alma de olvido y aura hasta tenés marido... ¡Las cosas que hay que aguantar!
M´hijita, me causa gracia tu nuevo estado civil porque has engrupido a un gil que creyó en tu aristocracia... Vos sos la ñata Pancracia, hija del tano Geralto, un goruta flaco y alto que trabajaba en La Boca ¿No te acordás, gringa loca, cuando piantaste al asfalto?
Y aura tenés vuaturé, usás tapao petit gris y tenés un infeliz que la chamuya en francés ¡Qué haces -tres veces qué haces-! señora Claisson Lavalle? Si cuando lucís tu talle con ese coso del brazo no te rompo de un tortazo por no pegarte en la calle.
Señora... ¡Pero hay que ver tu berretinn de matrona! Si te acordás de Ramona, abonále el alquiler... No te hagás la rastacuer desparramando la guita; bajá el copete, m´hijita, con tu pinta abacanada... ¡Pero si sos más manyada que el tango "La Cumparsita".