Nuestras horas son minutos cuando esperamos saber, y siglos cuando sabemos lo que se puede aprender.
La envidia de la virtud hizo a Caín criminal. ¡Gloria a Caín! Hoy el vicio es lo que se envidia más.
No extrañéis, dulces amigos, que esté mi frente arrugada; yo vivo en paz con los hombres y en guerra con mis entrañas.
Ayer soñé que veía a Dios y que a Dios hablaba; y soñé que Dios me oía... Después soñé que soñaba.
Bueno es saber que los vasos nos sirven para beber; lo malo es que no sabemos para qué sirve la sed.
Todo pasa y todo queda; pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar.
Ya hay un español que quiere vivir y a vivir empieza, entre una España que muere y otra España que bosteza. Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios. Una de las dos Españas ha de helarte el corazón