Un aroma, un beso, un paisaje, una noche de amor, una calle, la magia de la primera vez, un camino que te regresa sin quererlo a un tiempo que pasó y te pasea por el barrio que te vio crecer.
Que te dibuja la sonrisa que alguien apagó o te devuelve una mirada que te hace temblar, que te despierta la ternura del primer amor y te repite cuántos años han pasado ya, que desempolva los secretos de tu corazón y te acompaña hasta el pasado una y otra vez cuando el recuerdo se despierta en el corazón.
Una tarde de lluvia, una historia al calor del hogar un poema o el brillo de una estrella fugaz, un juguete que te devuelve hasta la infancia sin quererlo tu y te pasea por la calle que te vio jugar, que te acompaña hasta encontrar un nido de gorrión o te sumerge en el vacío de la soledad.