A ésa la he querido yo a rabiar, la he querido yo a morir, tú no puedes figurarte como la he podido amar.
A ésa que ahora está como ya ves, destruida de rodar, yo la he escrito mil poemas a sus ojos y a su piel.
A ésa que la ves ahí dando tumbos con borrachos, con ilusos, hasta el alma le entregué. A ésa que hoy se enreda con cualquiera yo le di mi vida entera y hoy se la daría otra vez. A ésa...
A ésa la he enseñado yo a besar, a sentir y a ser mujer. Y ya ves que aventajada, ¡Quién se lo iba a suponer!
A ésa la he querido yo a rabiar, la he querido yo a morir, tú no puedes figurarte como la he podido amar.
A ésa que la ves ahí dando tumbos con borrachos, con ilusos, hasta el alma le entregué. A ésa que hoy se enreda con cualquiera yo le di mi vida entera y hoy se la daría otra vez.