Una vez hubo un hombre que se escondi� en un lugar con monta�as tan grandes y tan fr�as como el mar en la oscura monta�a se arrastra una voz hacia cuevas estra�as en busca de un perd�n.
Pero el sol lloraba sin cesar y su llanto yo lo pude escuchar frente a m� a un hombre pude mirar y en sus ojos a la muerte vi caminar
Hassan Ben Sabath
Bajo un �rbol de estrellas florec�a la maldad mil rayos y centellas alumbran perversidad en el viento se o�a a la muerte cantar y en el cielo ve�a un �ngel despertar.
Pero el sol lloraba sin cesar y su llanto yo lo pude escuchar frente a m� a un hombre pude mirar y en sus ojos a la muerte caminar y jam�s nadie lo reconoci� pero su nombre al mundo atemoriz�