Lo mismo que er fuego fatuo, lo mismito es er queré. Le juyes y te persigue, le yamas y echa a corré. ¡Lo mismo que er fuego fatuo, lo mismito es er queré! Nace en las noches de agosto, cuando aprieta la calor. Va corriendo por los campos en busca de un corasón... ¡Lo mismo que er fuego fatuo, lo mismito es er queré! ¡Malhaya los ojos negros que le alcanzaron a ver! ¡Malhaya er corasón triste que en su yama quiso arder! ¡Lo mismo que er fuego fatuo se desvanece er queré!