Podria haberte dicho niña Que te regalé mi alma, Que cuando yo pienso en ti No veo la última palabra Y al final, y al final, Y al final, y al final, Sigo cuidandote, sigo cuidandote Como tu ángel de la guarda.
Podria haberte dicho Que eres tu la mas hermosa Que cuando amanece por ti niña Suspiran las rosas. Que el vuelco que ha dado mi vida Fue por ti, por tu mirada, Por aquella dulce Conversación sin fin. Podria haber desecho El sentimiento de mi culpa, Arriesgarme a tu infinito Y cambiar lo que hay escrito Desatar la tempestad Y estar a tu lado pa cuidar yo de ti Ah… te regalé mi alma.
Podria haberte dicho niña Que te regalé mi alma, Que cuando yo pienso en ti No veo la última palabra Y al final, y al final, Y al final, y al final, Sigo cuidandote, sigo cuidandote Como tu ángel de la guarda.
El mar nunca se calla Es el reflejo puro y duro De la realidad de esta historia Entre tu y yo. Mientras yo suspiro y revivo Aquella noche mágica de los dos Oí tu voz… “intentalo”
Pero ¿cómo lo consigo? Si tu no estás aquí conmigo A mi lado para hacerte feliz Si tu vida hoy por hoy Gira en torno a él Y yo desde la soledad, siento el dolor.
Llevo unas cuantas noches soñando Con una silueta de mujer, y no es real Y sé quién es, y sé quién es, Y no es real, pero sé quién es… Llevo unas cuantas noches soñando Con una silueta de mujer, y no es real
Podria haberte dicho niña…
Ahora ya no sé distinguir Donde debo parar, quedar, callar, Hablar de ti en todo momento del día Me llena de alegría mi vida… Que linda eres, que linda eres, Y sin poder tenerte. Cuantas veces atormenta Lo que pudo ser, Cuantas veces atormenta que no fue Cuantas veces atormenta Lo que pudo ser niña Cuantas veces atormenta Y al final no fue…
Podria haberte dicho niña Que te regalé mi alma, Que cuando yo pienso en ti No veo la última palabra Y al final, y al final, Sigo cuidandote, Como tu ángel de la guarda.