Cantaron los pájaros en mi puerta no los quise oír pensaban convencerme que el optimismo existía huir de la ciudad terminar el abrir y cerrar de puertas con lo mío, y con lo tuyo y descubrir lo nuestro.
El cantar de gallos el trinar de aves la mañana roza mi cara quiero saltar a la vida y sentirme en su flujo ser uno que despierta y canta agradecido.
Afirma mi esqueleto, hermano se está curvando con el peso de la pena las flores me están huyendo y el cemento se resbala en mi cara guía mi cabeza hacia el cielo y muéstrame la esperanza has que canten para mi las aves y úneme a su alegría.