Huida inesperada De los brazos de nadie, Solo por la vías tristes...
Momentos vividos contigo, Inmortalizados en mi alma...
Carne de mi carne, Sangre de mi estirpe, Agua de mis mares...
La noche no te detuvo, Ante el futuro, que te arrebató de mí. Inexperto amigo, Precoz en el tiempo, Eterno en mí...
El verdor de tus ojos Está tatuado en mi destino. Estás en mi más vivo, que yo mismo...
Cuando hablo, es tu voz, La desahoga este llanto, Cuando río es tu alegría, que me brota...
En tu tumba se fueron Los secretos de la amistad. Tu agonía no me esperó. Ahora sé, que el corazón También se cansa de esperar. El cariño, que siempre se deseó. Agua de mis mares, Eterno en mí...