¡Ey tú!, que nunca miras hacia atrás, que vas dejando rotas al pasar. ¡Quieto ahí! Que yo ya estoy de vuelta. Quizás me subestimas pero soy de esas con coco y cuerpo de mujer mortal y cara de muñeca. Si crees que vas a vencer, inténtalo otra vez. Verás que ya te avisé, yo no sé perder.
Tengo mucha vida y este don de gentes, creo en mi misma, no es cuestión de suerte. Tengo otro concepto de comerme el mundo. Amor, como yo no hay dos.
Tu amor no es suficiente para mí, ya no me quedan ganas de fingir que soy aquello que tú esperas. Si crees que vas a vencer, inténtalo otra vez. Verás que ya te avisé, yo no sé perder.
Tengo mucha vida y este don de gentes, creo en mi misma, no es cuestión de suerte. Tengo otro concepto de comerme el mundo. Amor, como yo…
Nunca he querido un hombre que me entienda, que crea que el mundo sin él no da vueltas. Hoy no aguanto más, apuro el trago y me voy buscando un subidón de pura adrenalina. No insistas, no me sigas.
Porque tengo mucha vida y este don de gentes, creo en mi misma, no es cuestión de suerte. Tengo otro concepto de comerme el mundo. Amor, como yo… Y es que tengo mucha vida, creo en mi misma. Tengo otro concepto de comerme el mundo amor como yo no hay dos.