En la playa y con honores enterramos los relojes, funeral por el despertador.
Luego, en un corcel ciclista damos vueltas a la isla y no hay podio para el vencedor.
Escribieron nuestros nombres con brochazos blancos y al revés, igual que en Tourmalet, lanzados por un mes, van
perdidos en el pelotón, salvados a contrarreloj, en brazos del sofá, van nadando en contrapedal, hundidos en la general, pero a flote.
Cromos, naipes, sombras, siestas, libros viejos y una gesta que se asoma en el televisor.
Reinas en el chiringuito miran a un señor bajito que dejó en la arena su maillot.
Carne de meta volante, flota de medusas al sprint. Agosto llega al fin, septiembre ya está aquí, van
perdidos en el pelotón salvados a contrarreloj, en brazos del sofá, van nadando en contrapedal, hundidos en la general, pero a flote.
Quince eneros después, ya con julio en ciernes, no dan para más los pies y nos quema un sol ausente, inerte.
Mientras van ya bajando el puerto de las tres con diarios del ochenta y seis guardando el pecho, y van, van quedando fuera de control repiten la misma canción sin ver París, y van, y van
perdidos en el pelotón salvados a contrarreloj, en brazos del sofá, van nadando en contrapedal, hundidos en la general, pero a flote.
Antihéroes.
Fuente: musica.com Letra añadida por chuy_emmanuel95