Cuando el sufrimiento es infinito la sangre emana de sus cuerpos. Sus gritos ensordecen al verdugo quien ignora todo atisbo de dolor. Asesinando sus cuerpos inertes, son el placer que satisface tu gula. Asesinando sus cuerpos inertes, son el placer que satisface tu gula. La amargura de un inocente. La amargura de un inocente. La perversa rueda del sometimiento. Semejante ha quienes imponen su verdad en base a la violencia y represión. Me niego a formar parte de esto, denuncio tus maltratos y violencia. Me niego a formar parte de esto, denuncio tus maltratos y violencia. No hay olvido ni perdón. No hay olvido ni perdón mientras se sigue explotando. No hay olvido ni perdón. No hay olvido ni perdón mientras se sigue explotando, mientras el germen del fascismo circula. Las maquinas de exterminio devastan por el imperio. Esta tortura continua y participas siendo cómplice de todo este dolor.